Armas destacó que, a pesar de no contar aún con un puerto, la ciudad posee un punto de venta exclusivo donde más de 120 pescadores artesanales comercializan productos derivados del róbalo —el recurso pesquero más valioso de la zona—, como filetes, empanadas y pastas. “Esto nos permite mantener la oferta de pescado fresco los 365 días del año”, subrayó.
El secretario remarcó que esta iniciativa se enmarca en el plan de ampliación de la matriz productiva de la ciudad, vinculado a la prórroga del Subrégimen Industrial. “Estamos apostando al desarrollo de sectores estratégicos como la pesca, que no solo generan alimentos, sino también empleo genuino”, afirmó.
Además, adelantó que se están analizando proyectos con alto potencial, como la cría de truchas en sistemas de recirculación cerrada (RAS), utilizando infraestructura existente en la ciudad. No obstante, reconoció que uno de los principales desafíos para avanzar en estos proyectos es el financiamiento.
En cuanto al futuro del sector, Armas hizo hincapié en la necesidad de avanzar con obras de infraestructura como muelles y rampas. “Contar con un puerto es clave para que la pesca artesanal pueda escalar, diversificarse y aprovechar mejor los recursos del mar”, indicó.
Por último, resaltó el rol del Fondo de Ampliación de la Matriz Productiva (FAMP), una herramienta clave para el desarrollo económico de Tierra del Fuego. “Hoy más que nunca es fundamental generar producción local de alimentos y reducir la dependencia del continente”, concluyó.