A esta hora, trabajadores estatales nucleados en la Asociación Trabajadores del Estado (ATE) marchan desde San Martín y Guaraní hacia Casa de Gobierno, en el marco de una jornada de protesta contra la última oferta salarial del Ejecutivo provincial.
La medida incluye volanteada e información a vecinos y comerciantes sobre las razones del conflicto. El secretario general de ATE Ushuaia, Carlos Córdoba, explicó en FM Master´s, que el Gobierno propuso un 4% de aumento recién en septiembre y un pago de $25.000 por junio y julio, a cobrarse recién en noviembre o diciembre.
“Eso es una tomada de pelo. Los aumentos salariales tienen que existir y mantenerse. No alcanza con parches ni con bolsones de comida”, remarcó Córdoba.
El dirigente sindical negó divisiones con ATE Río Grande y aclaró que las decisiones se toman en asambleas locales, aunque recordó que en Ushuaia el costo de vida es entre 20% y 30% más alto, lo que hace insuficiente la propuesta.
También cuestionó el manejo de las últimas paritarias, que cambiaron de sede a último momento: “Primero dijeron que era en Ushuaia, después en Tolhuin y terminaron en Río Grande. Nos pareció una falta de respeto gravísima”.
Córdoba advirtió que si no hay una convocatoria urgente, el miércoles habrá otra movilización y se definirá la posibilidad de un paro provincial. “Una parte de los compañeros ya lo pide, pero queremos consensuar entre todos”, señaló.
El sindicalista también cuestionó la falta de soluciones en la obra social OSEF, pese al acampe de semanas atrás: “Siguen jugando hasta con la salud de los trabajadores. No han demostrado nada”.
Con tono crítico, Córdoba cerró:
“Hoy me siento con una pistola en la cabeza. El Gobierno se excusa diciendo que no hay plata porque la culpa es de Milei, pero no vemos gestión ni decisiones firmes. Con el sueldo que tienen los trabajadores ya no se les puede sacar una sola moneda más, porque lo van a joder”.