La magistrada destacó la implementación del sistema Kayen, que permite a los abogados ingresar presentaciones digitales 23 horas al día durante cinco jornadas semanales. “Se han mejorado muchos de los temas que preocupaban a abogados, magistrados e incluso empleados. Estamos trabajando en una mesa de interacción entre todos los agentes de incumbencia y se están logrando importantes avances”, señaló.
Además, mencionó la interacción con otros poderes judiciales del país a través de la Junta Federal y la Corte Suprema. “Eso agiliza muchísimo algunas tramitaciones. Aunque todavía es incipiente, con la experiencia de otras provincias vamos a poder seguir progresando”, dijo.
Consultada sobre el presupuesto, Battaini explicó que en 2024 fue de 90 mil millones de pesos para alrededor de 905 empleados. “Visto así parece tremendo, pero hay que ver todo lo que gastamos y lo que tenemos que invertir para poder funcionar. No es solamente en haberes, aunque la mayor parte se destina a eso porque nuestra tarea es fundamentalmente humana”, detalló.
La jueza ilustró los costos ocultos del servicio: “Si tenemos que hacer un estudio genético de ADN en una causa penal, esa muestra debe ir con custodia. Mandarla a Río Gallegos nos sale más caro que enviarla a Buenos Aires. También hay que trasladar testigos, pagar alquileres, luz, gas y servicios. Nosotros funcionamos 7 por 24, no se corta a las dos de la tarde como muchos piensan”.
Battaini insistió en que el modelo judicial que impulsa debe tener “interconexión con la comunidad”. En ese sentido, recordó programas de acercamiento a los barrios y a las escuelas que buscan recuperar. “Hace más de 20 años comenzamos con un acercamiento a la comunidad y estos últimos años esa dinámica se había detenido. La estamos retomando, porque solos no podemos dar respuestas si no tenemos conexión con el resto de los poderes”, afirmó.
La presidenta del STJ valoró especialmente el programa desarrollado en Río Grande con escuelas secundarias: “Nos permitía conocer qué piensan nuestros jóvenes y aportar capacitaciones en temas que les preocupan, como el bullying. Fue muy importante para ellos y para nosotros”.
Al ser consultada sobre la percepción de lentitud en algunos procesos, Battaini respondió: “En lo que a mí respecta, la política no influye. Los tiempos de las causas dependen de cada expediente. Existen plazos procesales, pero muchas veces se presentan nulidades o nuevas pruebas que alargan los procesos. A veces estamos por llamar a sentencia y se incorpora un hecho que debe ser resuelto, y eso requiere traslado a todas las partes”.
La magistrada diferenció que “hay procesos rapidísimos, como una exclusión del hogar o una medida cautelar”, frente a otros que demandan más tiempo por su complejidad.
Consultada sobre denuncias de supuestos sobreprecios en la Obra Social del Estado Fueguino (OSEF), sostuvo: “A lo mejor los fiscales están investigando y no tienen por qué decirnos hasta que no salga el hecho o hagan un requerimiento ante el juez. Yo no puedo aventurarme a decirlo, sería una buena pregunta para el Procurador General”.
La presidenta del STJ destacó que la capacitación judicial es continua: “La capacitación siempre es poca. Se hacen diplomaturas, cursos en tecnologías, derecho penal, derecho procesal, además de capacitaciones virtuales. Estamos trabajando en leyes obligatorias como Lucio, Micaela y Olimpia”.
Respecto al cupo femenino, aseguró: “Nuestra provincia tiene un capital importante de mujeres. El techo de cristal todavía no se rompió, pero se empieza a astillar. No siempre pasa por el género, sino por la preparación para juzgar con perspectiva”.
Battaini informó que están en marcha concursos para poner en funcionamiento el Juzgado de Familia N.º 3 en Río Grande antes de fin de año y un nuevo juzgado civil. También se evalúa ampliar fiscalías y defensorías en los distritos y en Tolhuin. “Todo depende del presupuesto, pero es una necesidad para mejorar el servicio”, afirmó.
Tras el paro de 72 horas de judiciales, la magistrada valoró el diálogo con los sindicatos: “Estamos trabajando en conjunto con los gremios. Ellos tienen que defender su situación y tratamos de que los sueldos sigan al menos la inflación, aunque es difícil. El 99% de nuestra gente es lo más valioso que tiene el Poder Judicial”, resaltó.
Battaini respondió a cuestionamientos por supuestos gastos de viajes al exterior: “Todos los viajes desde que estoy en Tierra del Fuego me los he pagado de mi propio patrimonio. Ya sea a la ONU por Malvinas, a la Corte Interamericana, al Tribunal de Casación Italiano o al Supremo Español. No viajo con fondos de la provincia”.
Sobre los casos que involucraron a jueces provinciales, Battaini fue categórica: “La característica del juez tiene que ser la prudencia. Hasta que no se investigue, uno no puede condenar antes de que el proceso se lleve a cabo. Una de las obligaciones que tenemos es mantener la paz social, y mal lo podemos cumplir si opinamos sin esperar el resultado de las investigaciones”.
Finalmente, al referirse a proyectos pendientes, indicó: “Si queremos juicio por jurados vamos a tener que aumentar el presupuesto. Vamos por buen camino, pero todavía falta capacitar y madurar para poner en marcha el sistema adversarial dentro de la justicia penal”.