El legislador Matías Lapadula (Provincia Grande) analizó el proyecto de presupuesto 2026 y fue tajante en su crítica: “El 98% de los gastos son gastos corrientes. Esto es nula inversión pública, nulas obras”. Para el parlamentario, esta definición refleja la continuidad de un modelo de gestión que no genera mejoras en infraestructura ni en servicios básicos.
“Así es como tenemos las escuelas destruidas y no en condiciones, así es como la salud pública está en una situación crítica”, advirtió, señalando que la falta de inversión es una decisión política que impacta de manera directa en la calidad de vida de la población.
Lapadula sostuvo que “no cambia en absoluto la manera de llevar adelante la gestión pública” y reclamó repensar el rol del Estado. “No se puede gastar todo en sueldos y gastos corrientes. Tenemos que definir qué provincia queremos, qué tipo de Estado necesitamos y administrar los fondos públicos de manera más eficiente”, expresó.
Como ejemplo de otra forma de gestión, destacó lo que sucede en Río Grande, donde el municipio continúa ejecutando obras con fondos propios pese al corte de financiamiento nacional. “Cuando se planifica de otra manera, las obras se hacen, incluso aquellas que estaban previstas con fondos nacionales”, dijo.
Finalmente, el legislador insistió en la necesidad de un cambio de prioridades: “No podemos depender absolutamente siempre de Nación para obras mínimas. Hay que tener un presupuesto enfocado en inversión y desarrollo para que la provincia pueda crecer con autonomía”.