En diálogo radial en FM La Isla, el secretario adjunto de la Unión Obrera Metalúrgica (UOM) de Río Grande, Marcos Linares, analizó el escenario político y económico del país y alertó sobre una “pérdida total de soberanía” frente al condicionamiento financiero externo y la falta de políticas nacionales que respalden la producción. “Si me preguntás, yo creo que ya no somos ni siquiera el patio trasero. Hay una intervención directa del Tesoro de los Estados Unidos en la economía de nuestro país. Ya no tenemos ni siquiera la capacidad del manejo de la economía”, sostuvo.
El dirigente cuestionó con dureza la actitud del gobierno nacional frente a los recientes acuerdos internacionales. “El conjunto de ciudadanos esperaba anuncios importantes, pero el mensaje fue: ‘voten a Milei porque si no, les saco toda la ayuda’. Tiene un nivel de descaro absoluto. En mis 48 años no me tocó vivir algo así”, expresó.
Linares vinculó el panorama político con el deterioro del entramado productivo y laboral. “No hay un lineamiento desde el gobierno nacional que busque defender la industria nacional, los puestos de trabajo o la soberanía. Desde el día que asumieron mandaron las reservas de oro a Gran Bretaña y se cansaron de adular a los Estados Unidos, mientras insultan a nuestros propios dirigentes”, cuestionó.
En relación con las modificaciones a los procesos productivos solicitadas por las cámaras empresarias, el gremialista confirmó que la UOM actuó de inmediato. “El lunes convocamos al congreso de delegados y por unanimidad se votó un documento rechazando la baja del 70% al 30% de integración local. Eso significa menos puestos de trabajo, y es algo que no vamos a permitir”, aseguró.
También criticó el intento de retroceder hacia un modelo de ensamblado superficial. “Paradójicamente, los sectores empresarios están planteando que vayamos camino a eso que tanto denunciaron: poner una calco y dos tornillos. Nosotros no solo no lo avalamos, sino que vamos a resistirlo. Hasta ese 30% incluye el tergopor y las cajas”, ironizó.
Finalmente, Linares remarcó la voluntad del sindicato de mantener el diálogo, pero sin renunciar a sus principios: “Vamos a apostar al diálogo de manera constante, pero nuestra posición es clara: defender los puestos de trabajo, la industria nacional y el derecho a seguir habitando Tierra del Fuego. Esa es nuestra soberanía”.