El viaje, organizado por una agencia especializada, promete días de exploración en escenarios espectaculares y noches repletas de actividades temáticas, juegos sensuales y fiestas desbordantes de erotismo. A pesar del frío extremo, los pasajeros disfrutarán de un entorno "sexy y amigable", diseñado para maximizar el placer en cada rincón del barco.
Los boletos, vendidos a 12.000 dólares por persona, se agotaron rápidamente. Con turistas mayoritariamente estadounidenses y un argentino como único representante local, el crucero se posiciona como una experiencia única en uno de los paisajes más impresionantes del mundo.