A pesar de haber comenzado con expectativas altas, el joven pilarense se mostró frustrado por no poder cerrar una buena jornada y reconoció que tanto él como el equipo están teniendo dificultades para adaptarse al circuito y a las condiciones del clima.

Colapinto había iniciado la sesión con buen ritmo, posicionándose momentáneamente entre los primeros puestos. Sin embargo, con el correr de los minutos fue cayendo en la tabla hasta situarse 16°. En un intento por recuperar tiempo, intentó tomar una curva a toda velocidad, pero el auto no respondió como esperaba: perdió el control, hizo un trompo y terminó desbarrancando. Aunque en un principio parecía que podría reincorporarse, el monoplaza quedó visiblemente dañado, lo que obligó a los comisarios a sacar la bandera roja y eliminar al argentino de la sesión.

“Fue una pena, creo que venía siendo un buen día pero, obviamente, no lo cerramos bien. Hay que seguir trabajando porque nos está costando bastante en esta pista y estas condiciones con el viento también nos afectan”, declaró Colapinto visiblemente afectado tras la clasificación.

El piloto también apuntó a las dificultades para encontrar estabilidad en su Alpine: “Habíamos dado un paso para mejorar el auto en general, pero igualmente nos cuesta que sea predecible en las vueltas rápidas. Patiné saliendo de la última curva, toqué el piano y perdí el auto. Fue de una forma bastante agresiva, una lástima”.

Consciente del desafío que enfrenta, Colapinto destacó la necesidad de trabajo en equipo para revertir la situación: “Definitivamente, nos está costando y el auto no es el mejor, pero estamos trabajando para mejorarlo. Hay que seguir como equipo y mejorar todo esto”.

El argentino buscará revertir la página rápidamente de cara a la carrera, con la esperanza de que el equipo logre encontrar un mejor balance en el auto para pelear posiciones desde el fondo.