

En su primera declaración jurada como presidente, Javier Milei reportó un patrimonio de $206.046.375, lo que representa un crecimiento del 64% respecto al año anterior. El dato surge del documento presentado recientemente ante la Oficina Anticorrupción, correspondiente al ejercicio fiscal 2024.
Aunque el mandatario no incorporó nuevos bienes, el incremento se debe principalmente a la revaluación fiscal de propiedades y vehículos ya declarados, así como al ajuste del valor de sus ahorros en dólares.
Un inmueble en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires que pasó de estar valuado en $13,6 millones a $38,4 millones.
Dos vehículos: una Mercedes-Benz Sprinter 2015 y un Peugeot RCZ 2013, que también duplicaron su valor fiscal.
Ahorros en efectivo por US$ 20.000 y depósitos bancarios por US$ 65.542, valuados en conjunto en más de $88 millones al tipo de cambio oficial.
Créditos fiscales y bienes del hogar por casi $22 millones.
Sin deudas declaradas.
El aumento patrimonial, si bien elevado, no refleja nuevas adquisiciones por parte del presidente. De hecho, desde su entorno remarcaron que “no compró ni vendió nada” y que la actualización responde a un revalúo contable exigido por normas fiscales.
La secretaria general de la Presidencia, Karina Milei, también presentó su declaración jurada, en la que informó un patrimonio de $11,4 millones, lo que representa más del triple de lo que había declarado en 2023. Entre sus bienes figura un departamento con cochera en Vicente López, una caja de ahorro en pesos y créditos fiscales.
Aunque el número pueda resultar llamativo, el incremento patrimonial de Milei se encuadra dentro de lo previsto por las actualizaciones fiscales y no presenta incompatibilidades formales. Sin embargo, en un contexto de fuerte ajuste económico y caída del poder adquisitivo, los datos despiertan críticas por el contraste con la realidad de la mayoría de los argentinos.
Con esta presentación, Milei cumple con la normativa de transparencia, que obliga a los funcionarios públicos a informar su situación patrimonial al asumir y al cierre de cada año fiscal.