

El consultor y analista político Fernando Rodeles brindó una entrevista por FM Master´s, en la que analizó las razones detrás del respaldo social al presidente Javier Milei, basado en su artículo publicado en Ámbito titulado “Milei y el enojo argentino: cuando la crueldad es perdonada”. En su análisis, Rodeles plantea que el presidente no gana por su estilo violento o agresivo, sino que la sociedad lo tolera —o incluso lo perdona— porque representa simbólicamente un canal para expresar un enojo acumulado.
“No es que se premie la crueldad, sino que se le perdona. La sociedad está cansada, frustrada, resentida, y encontró en Milei a alguien que validó ese enojo. No necesariamente lo resuelve, pero lo traduce”, explicó.
Rodeles subrayó que este fenómeno no es nuevo, pero que se profundizó ante la ausencia de una alternativa política que logre enamorar. “La gente no vota por militancia o ideología, sino por su situación concreta. Hoy, si puede alquilar sin que le aumenten 30% el mes siguiente, eso pesa más que cualquier exabrupto presidencial”, remarcó.
En ese sentido, alertó que el respaldo al oficialismo está sujeto a resultados concretos:
“Si cambian las condiciones, la gente no va a bancarse a un presidente que grita o insulta. Todo está sostenido por datos económicos puntuales. Si eso falla, el respaldo también puede caerse”.
Consultado sobre si el Gobierno toma nota de esta dinámica, Rodeles consideró que parte del equipo de Milei sí estaría registrando señales de hartazgo:
“No creo que Milei insulte porque sí. Es parte de una estrategia que hasta ahora le funcionó. Pero si empieza a cambiar el tono, quizás están viendo que algo está empezando a hacer ruido”.
Respecto al escenario político actual, el analista señaló que la polarización entre La Libertad Avanza y el PJ no permite construir opciones superadoras, y que eso favorece la abstención electoral:
“Hay un electorado que no está participando, que no encuentra quién lo represente. A ese grupo, nadie le está hablando. Ahí hay una oportunidad enorme para construir algo nuevo”.
Rodeles también mencionó la necesidad de provincializar los discursos en las elecciones legislativas:
“Hay que construir candidatos que representen intereses locales. Que digan ‘yo voy al Congreso a defender Tierra del Fuego, o Chubut, o Salta’. Pero eso requiere trabajo, mensaje y credibilidad”.
Finalmente, abordó el rol de la comunicación política y el desafío que enfrentan los sectores progresistas frente al dominio digital de las derechas:
“El formato de redes como TikTok o Instagram hoy favorece a los discursos de derecha. Si la centroizquierda no da esa batalla, está perdida. Hay que adaptar el mensaje a las nuevas generaciones que van a definir el voto en los próximos años”.
Rodeles concluyó que, más allá de las estrategias, el votante argentino terminará evaluando con una pregunta simple: “¿Estoy mejor o peor?” Y en función de esa respuesta, se definirá el futuro político del país.