

La quinta sesión ordinaria del Concejo Deliberante de Ushuaia dejó más interrogantes que resultados. Con un inicio demorado, la jornada se extendió por poco más de treinta minutos y terminó con la decisión de pasar a un cuarto intermedio hasta el viernes 29 de agosto a las 11 horas, en lugar a confirmar.
En diálogo en FM Master´s, la concejal Daiana Freiberger (Provincia Grande) expresó su malestar por la dinámica de la sesión. “La verdad es que no termino de entender muy bien lo que sucedió. Después de un mes y medio teníamos sesión, y de forma intempestiva, la concejala del PJ solicitó un cuarto intermedio sin haber sido consultado con el resto de los concejales”, señaló.
La sesión estuvo marcada por las ausencias: Valter Tavarone (Somos Fueguinos) faltó por motivos de salud, Belén Monte de Oca (La Libertad Avanza) por razones personales, mientras que Fernando Oyarzun (FORJA) no presentó justificación oficial.
Según Freiberger, esta situación generó malestar en la comunidad: “Había vecinos que realmente tenían interés en distintos proyectos y que muy temprano se dieron lugar en el foyer de la Casa de la Cultura. Sin mayores explicaciones, se pasó directamente a un cuarto intermedio”.
La edil cuestionó además la falta de avance en proyectos vinculados a necesidades concretas de los barrios. Recordó que iniciativas como la pavimentación en Mirador del Fernández y calles de otros sectores siguen postergadas. También criticó el rechazo a declarar patrimonio histórico al histórico cartel de Ushuaia creado por la artista Elsa Zaparart.
“La solución estaba al alcance de la mano. Solo tenían que someterlo a consideración y levantar la mano. En vez de eso, lo mandaron a comisión mostrando nuevamente que la mezquindad política está por encima de cualquier solución”, afirmó.
Freiberger también reclamó mayor previsibilidad en el trabajo legislativo: “Ojalá pudiéramos tener un cronograma de comisiones que se respete. Es responsabilidad de los presidentes convocar, pero muchas veces no sucede. Es nuestro deber tratar los asuntos que nos traen los vecinos”.
La concejal advirtió, además, que el proyecto para regular las aplicaciones de transporte lleva más de un año sin avances: “Ya les cantamos el feliz cumpleaños. Lo mandaron al Consejo Asesor de Seguridad Vial para no resolver nada, y mientras tanto una aplicación local ya está funcionando sin control ni impuestos. El municipio pierde hasta de recaudar”.
Freiberger cerró con un mensaje directo: “Los caprichos personales terminaron primando sobre el sentido común, que es el menos común de los sentidos”.