

En comunicación con FM La Isla, el abogado y docente universitario Fermín Randon analizó el debate en torno al sistema previsional argentino y fue categórico al señalar que jubilarse “es un derecho constitucional” que no puede ser restringido por decisiones políticas o administrativas.
“Eliminar las moratorias o preferir al jubilado que se retiró sin moratoria frente al que sí lo hizo mediante ese mecanismo es discriminatorio. Estamos hablando de dos personas que tienen el mismo beneficio y a una le van a decir ‘a vos te toca un aumento y a vos no’. Eso es de total ausencia jurídica y flagrantemente inconstitucional”, sostuvo.
Randon explicó que las moratorias surgieron como respuesta al alto nivel de trabajo no registrado en la Argentina. “Las moratorias obedecen a dar una respuesta a todas esas personas que alguna vez trabajaron sin estar registradas y que al querer acceder a su derecho constitucional necesitan esa herramienta para lograrlo”, apuntó.
El especialista remarcó que el Estado tiene la obligación de garantizar derechos y que no puede retroceder en materia previsional: “Ninguna reforma puede retroceder en materia de derechos sociales, lo dice la Corte Interamericana de Derechos Humanos. Los jubilados no pueden estar peor, porque es un compromiso que asumió la Argentina”.
Al analizar los riesgos de una eventual reforma, planteó que lo que se observa es “una lógica con ausencia de conocimiento jurídico” y advirtió: “Si vos ves a tu papá o a tu mamá que trabajaron toda la vida como un gasto, en lugar de verlos como personas con un derecho, es muy difícil discutir seriamente”.
Randon también cuestionó el proceso de desprestigio hacia los beneficiarios de moratorias: “El sello de ‘no pagaron’ es una falacia. El que accede a la moratoria paga una cuota, no se le regala nada. Y si no hubiera existido esa herramienta, esas personas no se hubieran jubilado en términos reales”.
Finalmente, subrayó que el sistema previsional argentino está basado en la solidaridad: “La solución no está en sacar jubilaciones, sino en ampliar la base de aportantes. El problema no es cómo eliminar el sistema porque no conviene en un momento, sino cómo recaudar más para sostenerlo”.