

Comercios minoristas de Río Grande atraviesan una reducción sostenida de ventas que, según los almaceneros, se prolonga desde hace al menos un año y se aceleró en el último mes. La situación fue descrita por Luis Schreiber, referente del Centro de Almaceneros e integrante de la Cámara de Comercio local, en una entrevista radial.
En declaraciones en FM Provincia, Schreiber señaló que los hábitos de consumo cambiaron: “si antes llevaba algún producto de primera calidad, hoy lleva uno más barato y así, o no lleva”, y advirtió que en muchos casos los clientes incluso dejaron de comprar alimentos o recurren a compras en cuotas. “Cada vez estamos yendo menos a comprar lo que sea para la casa y obviamente que priorizamos la comida”, afirmó.
El dirigente puso énfasis en la magnitud de la merma: relató el caso de un comerciante que, con dos empleados registrados, tiene gastos de inversión de alrededor de “tres millones y medio, cuatro” y sufrió una baja de ventas “el 30%” en el último mes. A la vez, remarcó que la caída “viene de un año cayendo” y que no observan señales de recuperación en las políticas económicas actuales.
Schreiber también describió el impacto en márgenes de ganancia: “antes… te vendía 10 gaseosas de la más conocida, y esa gaseosa valía 5.000 pesos. Entonces… me quedaban 5.000 pesos. Ahora ya no vendo esas 10 gaseosas, vendo 10 gaseosas de las más baratas… me dejan muchísimo menos de ganancia… ya no me quedan 5.000 pesos, sino que me quedan 200 pesos”. A su vez comentó el aumento de costos fijos: “el gas… hace un año y medio atrás salía 2.000 pesos, hoy estamos en 30.000… la luz… hace un año y medio atrás 70.000 pesos, hoy casi pago los 500 cuidándola”.
Entre las medidas de alivio mencionadas figura un mecanismo del Banco Tierra del Fuego (BTF) con Visa Fueguina que permite al comerciante registrar una venta como pago único mientras ofrece al cliente la posibilidad de pagar en tres cuotas; Schreiber valoró ese tipo de iniciativas pero advirtió que “si esto no reactiva, está muy complicado”.
Sobre el futuro próximo, el referente se mostró escéptico respecto al escenario postelectoral y dijo que los comerciantes esperan una mayor devaluación: “ya te lo están diciendo… que después de las elecciones va a haber una devaluación fuerte, y que están sosteniendo con todo lo que pueden el precio del dólar, para que no se les vaya antes de las elecciones”.
Schreiber aseguró que los comercios que resisten son, en su mayoría, los históricos o propietarios del local, mientras que otros establecimientos reducen horarios o negocian condiciones laborales: “muchos han arreglado con sus empleados, trabajar menos horas… los gremios recalcan mucho que hay mucho trabajo negro”.
La voz del sector concluyó con un llamado a revertir la situación, aunque sin confianza en las medidas vigentes: “la verdad es que estamos complicados” y “con esta política que lleva adelante el Gobierno, no va a mejorar”.