En diálogo con FM Provincia, Córdoba sostuvo que el voto de enojo reflejó el abandono de las banderas históricas del movimiento obrero. “Hay compañeros que reconocen que se equivocaron. No midieron lo que estaba en juego, que era el rumbo del país y la defensa de la soberanía”, expresó. A la vez, hizo autocrítica del propio sindicalismo: “Siempre la culpa la tiene el otro. Tenemos que hacernos cargo todos, incluso los gremios, porque si seguimos divididos, nos van a seguir pasando por encima”.
El dirigente apuntó con dureza contra el gobierno provincial y cuestionó la falta de gestión en áreas sensibles. “Hay plata, pero falta decisión. Los ministros están atornillados al sillón mientras las escuelas se caen, los hospitales se vienen abajo y los comedores no tienen recursos. No se trata solo de reclamarle al gobierno nacional, sino de resolver los problemas acá, en casa”, señaló.
También denunció la desigualdad dentro del Estado: “Hay funcionarios políticos cobrando un millón trescientos mil pesos sin trabajar, mientras otros compañeros en cooperativas ganan cuatrocientas mil. Eso es explotación y el gobierno debe terminar con esa injusticia”. Recordó además que ATE luchó durante años por los pases a planta permanente y que la precarización “volvió a multiplicarse dentro del propio Estado”.
Córdoba reclamó un salario mínimo que supere el millón doscientos mil pesos, y advirtió que la inflación semanal “devora cualquier aumento”. Confirmó que esta semana habrá reunión paritaria y una asamblea frente a Casa de Gobierno para informar los resultados y definir acciones. “No se puede vivir con 400 mil pesos cuando los precios suben todas las semanas”, subrayó.
En otro tramo, el dirigente reivindicó la defensa del subrégimen industrial y la Ley 19.640, señalando que “fue una conquista que garantiza soberanía, trabajo y futuro, y que no puede rifarse por falta de coraje político”.
Finalmente, hizo un llamado a la unidad provincial y social: “Tenemos que dejar de mentirnos. No sirve salvarse uno solo mientras el resto se hunde. Los políticos deben trabajar por todos los pibes, no solo por los de ellos. Si seguimos mirando para otro lado, lo que está en juego no es un salario, sino el futuro de la provincia y del país”.