Lapadula analizó que la contienda electoral “se nacionalizó y polarizó en todo el país”, pero que, pese a ese contexto, su espacio “rompió la lógica de la grieta entre Milei y el kirchnerismo”. “Enfrentamos a dos sellos nacionales consolidados, con el respaldo explícito de Javier Milei y de la propia Cristina Kirchner, y aun así logramos una representación sólida y propia”, sostuvo.
El legislador agradeció el acompañamiento de los votantes y afirmó que el resultado “expresa una esperanza real de transformación”. “Los fueguinos y fueguinas que nos apoyaron votaron con esperanza, con futuro. No fue un voto en contra de nadie, sino a favor de una provincia distinta”, remarcó.
También cuestionó los intentos de responsabilizar a su espacio por la fragmentación opositora: “No hay una unidad mágica que garantice ganar una elección. La unidad sin convicción no sirve. Nosotros no íbamos a sumarnos a un lugar donde no compartimos la forma de gestionar ni la mirada sobre la provincia”.
Lapadula apuntó directamente al Gobierno fueguino por el descontento social: “La gente castigó a una gestión que no da respuestas en salud, educación ni energía. Cuando el Estado no funciona, la sociedad termina eligiendo a quienes quieren destruirlo. Esa es la verdadera causa del voto bronca”.
Sobre el futuro político, adelantó que el bloque Provincia Grande ya trabaja en el análisis del presupuesto provincial y pidió “enfocar el debate en los problemas reales de los vecinos”. Además, rechazó la convocatoria a una elección constituyente: “No es momento de pensar en reformas, hay urgencias mucho más graves que resolver en Tierra del Fuego”.