El Ministerio de Educación de la provincia confirmó que el último día de clases será el 19 de diciembre, completando así el ciclo lectivo 2025 que comenzó el pasado 5 de marzo. Sin embargo, la distancia entre lo planificado y lo efectivamente dictado vuelve a quedar en evidencia al cierre del año: los 190 días estipulados por ley estuvieron, otra vez, lejos de cumplirse.
Durante el año escolar, el sistema educativo fueguino atravesó reiteradas jornadas de paro docente, asambleas gremiales, desobligaciones y suspensiones por problemas edilicios, además de las interrupciones propias del calendario institucional. Todo eso redujo significativamente el número de días con clases normales en los establecimientos educativos de la provincia.
El receso invernal, que se extendió del 14 al 25 de julio, también marcó el punto medio de un ciclo que llegó al segundo semestre con un clima de alta conflictividad entre el gremio docente SUTEF y el Gobierno provincial. Las discusiones salariales y los reclamos por infraestructura escolar dominaron buena parte de la agenda educativa durante 2025.
Pese a que el calendario formal se mantuvo intacto, en los hechos Tierra del Fuego volvió a ubicarse entre las jurisdicciones con menor cantidad de días efectivos de clases en el país. Una situación que preocupa tanto a las familias como a las comunidades educativas, especialmente ante la cercanía de los exámenes finales y los actos de cierre del ciclo.
El desafío ahora será planificar un 2026 que logre recuperar parte del tiempo perdido y garantice la continuidad pedagógica que la ley exige pero que, año tras año, se ve comprometida por la realidad provincial.