Freites señaló que el oficialismo nacional consolidó una base parlamentaria que le permitirá llegar al quórum “con facilidad”, sumando aliados y nuevos pases. “Es claro que el oficialismo va a contar con el número necesario”, afirmó, mencionando la incorporación reciente de Campero, Noguera y otros legisladores que comienzan a alinearse al Gobierno.
En relación a Unión por la Patria, Freites reconoció que todavía no está claro cuántos diputados permanecerán dentro del bloque: “Es importante que este zarandeo se dé ahora y que finalmente queden quienes deciden quedarse”. No descartó la formación de interbloques, como ya ocurre en el Senado, debido a diferencias marcadas entre sectores referenciados en Máximo Kirchner y los alineados a gobernadores peronistas.
La diputada también advirtió que lo que ocurra en la provincia de Buenos Aires —particularmente la aprobación del presupuesto y el endeudamiento— podría generar nuevas tensiones internas y acelerar la salida de algunos legisladores.
Freites confirmó que el primer debate fuerte será el presupuesto nacional, que según adelantó podría reiniciarse desde cero por decisión del oficialismo. Luego vendrá la discusión por las reformas laboral, educativa y tributaria, cuya presentación sería entre mediados de enero y febrero.
Sobre estos proyectos, remarcó: “La reforma laboral es una ley de la dictadura que necesita cambios, pero no estamos de acuerdo con lo que plantea el Ejecutivo. Debemos dejar de negarnos a todo y llevar propuestas alternativas”. En materia educativa cuestionó que el Gobierno impulse un modelo híbrido y virtual que podría excluir a sectores sin acceso a tecnología: “La escuela pública es esencial. No podemos reemplazar la sociabilidad por una pantalla”.
Freites reconoció que el escenario parlamentario será “muy distinto” al de los últimos años, con gobernadores que recuperaron poder después de las elecciones y que ahora buscan mayor protagonismo en la Cámara. “El diputado librepensador no existe en esos distritos; responden a conducciones férreas”, señaló.
Por último, adelantó que en diciembre comenzarán las sesiones extraordinarias para tratar el presupuesto y reformas penales, mientras que las reformas estructurales llegarán en 2026. “Va a ser un período duro. Nos hace falta aire para volver a nuestras provincias, escuchar a nuestra gente y prepararnos para lo que viene”, cerró.