Desde el primer momento, la familia recibió información confusa. “Desde el momento que él llegó al hospital nos habían dicho ocho. Y ahora recién lo confirmó la autopsia que son 34 las puñaladas”, relató Velásquez, aún conmocionada por la magnitud del ataque.
“Llegó directo a asesinar”
Según explicó, la única versión clara de lo ocurrido es la de su propio hijo, que estuvo allí. “Yo tengo la versión de mi hijo, que lamentablemente estuvo en ese momento”, dijo.
El adolescente le contó que Moreyra “llegó directamente a buscarlo a él” y describió que el ataque comenzó cuando Alberto intervino para evitar que echaran a una persona de la casa. “Es su casa y no iba a permitir que echaran a nadie”, recordó sobre las palabras que habría dicho Scariot antes de la agresión.
“Mi hijo está completamente destrozado”
Dilan no solo presenció lo ocurrido, sino que vivió una de las escenas más traumáticas que puede enfrentar un niño de su edad.
“Él tiene 14 años, es un niño. Es un niño, lo ves grande, pero es un niño. Y sí, la verdad, que completamente destrozado. Ver a su papá desangrarse en sus brazos”, expresó.
El menor creyó que su padre moriría allí mismo: “Sentir él que si él no reaccionaba, lamentablemente se le moría ahí”.
“No entiendo cómo dice que no se acuerda”
La madre también manifestó su indignación frente a la declaración de Moreyra, que aseguró recordar solo una puñalada.
“No entiendo. La verdad es que no me entra, no puedo comprenderlo. Y que diga hoy que no se acuerda, que se acuerda de solamente una puñalada... Me parece, no sé, no lo puedo explicar”, sostuvo sobre los dichos del imputado.
Esperanzas que se apagaron
En un primer momento, la familia creyó que Alberto podría recuperarse. “Nos dijeron que no tenía ningún órgano dañado, ningún órgano perforado… solamente fue la pérdida de sangre. Que perdió tres litros de sangre”, explicó.
Aun así, mantenían ilusión: “Al darle la transfusión él podía despertar. Estábamos llenos de esperanza, la verdad”.
Agradecimientos y pedido final
Velásquez agradeció especialmente la ayuda recibida durante los días posteriores al crimen.
“Agradecemos a toda la gente que pudo colaborar, y al sindicato de camioneros, al secretario general Pedro Abel, que nos colaboró con los pasajes”, señaló.
Ahora, aseguró que comienza una nueva etapa: la de exigir justicia. “Queremos justicia, queremos una condena ejemplar. Queremos perpetua, que no tenga ningún tipo de beneficio”, afirmó.
Y agregó: “Que sea una condena firme, que sea perpetua. Justicia por Alberto”.
La familia espera un pronunciamiento judicial una vez finalizada la feria y confía en que la causa avance con la máxima severidad prevista para un hecho que marcó para siempre la vida de un adolescente y destruyó a una familia entera.
