Se trata de Joaquín Emilio Maidana, quien fue detenido el 5 de noviembre de 2024, cerca de las 16 horas, cuando arribó al control fronterizo conduciendo un camión de transporte de cargas que se dirigía desde Buenos Aires a Río Grande.
Durante una inspección de rutina, personal del Servicio Nacional de Aduanas detectó en la cabina del vehículo siete frascos de vidrio con marihuana, algunos ocultos dentro de un saco de dormir, otros en la guantera y uno en una prenda de trabajo. El pesaje total arrojó 775 gramos de cannabis.
Ante ese hallazgo, la revisión se profundizó y permitió encontrar, en la litera utilizada por el chofer, cinco paquetes tipo “ladrillo” que contenían clorhidrato de cocaína, con un peso total de 5 kilos y 633 gramos, además de dinero en efectivo.
Durante el juicio oral, Maidana reconoció los hechos y explicó cómo se involucró en la maniobra. Señaló que, mientras residía en Río Grande, fue contactado por una persona de nacionalidad boliviana que le ofreció dinero a cambio de trasladar repuestos usados hacia Buenos Aires, tarea que realizó en dos oportunidades.
Con el tiempo, el mismo contacto le propuso un nuevo envío en sentido inverso, desde el Mercado Central del Gran Buenos Aires hacia Tierra del Fuego, incluyendo inicialmente el traslado de marihuana a cambio de una paga por gramo. Posteriormente, el 2 de noviembre, ya en el Mercado Central, le ofrecieron transportar además cinco paquetes, por los que recibiría 800 dólares cada uno, junto con frascos de marihuana.
Según declaró, aceptó motivado por la ganancia económica y emprendió viaje hacia el sur. Tras realizar trámites aduaneros en Río Gallegos, continuó por territorio chileno hasta llegar a Monte Aymond, donde finalmente fue detenido por personal de Aduanas, PDI y SAG.
El tribunal resolvió condenarlo a cinco años de prisión, una pena inferior a la solicitada por la Fiscalía, que había requerido siete años. También se redujo la multa, que pasó de 100 a 10 UTM, equivalente a $695.420.
La sentencia contempla un régimen de libertad vigilada intensiva, con la obligación de fijar residencia en Punta Arenas. Además, Maidana quedó con arraigo nacional, por lo que no puede salir del país.
El abogado defensor, Leonardo Vallejos, expresó su conformidad con el fallo y destacó que su cliente reconoció su responsabilidad y colaboró durante el proceso judicial.