RIO GRANDE.- El diputado Miguel Rodríguez expuso un crudo panorama sobre el presente de las instituciones de seguridad fueguinas al definir como insostenible el escenario actual de las dependencias. La presentación pública del legislador tuvo lugar luego de que se constatara que diversos edificios policiales se quedaron sin gas a raíz de una deuda acumulada por la administración provincial con las prestatarias del servicio.

Rodríguez tildó de insólita la resolución tomada en algunas de estas sedes donde la falta de temperatura adecuada por el clima austral obligó a trasladar las funciones de los uniformados a sus domicilios. Para el referente de la oposición resulta inaceptable que un servicio de carácter primordial deba interrumpir su atención presencial o derivar al personal a tareas domiciliarias por la falta de cumplimiento en el pago de las facturas de energía. El parlamentario remarcó que esta falencia estatal pone en riesgo directo el resguardo de las familias de la isla.

Sumado al déficit en la infraestructura de las bases operativas el legislador puso el foco en la realidad de los haberes que perciben los integrantes de la fuerza. En su visión la operatividad de los cuadros se encuentra comprometida por remuneraciones que se sitúan por debajo de los costos de vida locales, lo cual genera un clima de desánimo generalizado entre los efectivos que deben garantizar el orden público.

De acuerdo a la mirada del diputado la sumatoria de edificios sin los suministros más elementales y la erosión del poder adquisitivo de los policías conforma una situación de desamparo institucional. Bajo esta premisa el representante legislativo exigió al Gobierno provincial una intervención inmediata para revertir el deterioro y asegurar que los recursos de seguridad vuelvan a funcionar con la eficiencia que la población demanda.