La Legislatura de Tierra del Fuego cerró el período ordinario 2025 con una serie de decisiones de alto impacto político, económico y productivo. En las últimas sesiones, el Parlamento provincial avanzó en iniciativas vinculadas al control de los recursos estratégicos, el reparto de ingresos y la redefinición del modelo de desarrollo fueguino.
Uno de los temas centrales fue la autorización para la cesión de áreas hidrocarburíferas que operaba YPF a la empresa estatal Terra Ignis Energía S.A.. La medida, aprobada por mayoría, habilita a la provincia a asumir un rol más activo en la explotación y administración de sus recursos energéticos, con el argumento de preservar empleo, sostener inversiones y fortalecer la soberanía sobre los hidrocarburos. El debate dejó expuestas fuertes diferencias entre oficialismo y oposición, especialmente en torno a los pasivos ambientales y las garantías de rentabilidad futura.
Otro punto relevante fue la modificación de la ley de coparticipación municipal, que incrementa el porcentaje de ingresos por regalías hidrocarburíferas destinado a los municipios. La iniciativa apunta a compensar la caída de recursos que enfrentan las ciudades fueguinas y a fortalecer sus finanzas en un contexto de restricción presupuestaria generalizada. Si bien la norma fue celebrada por intendentes, también generó reparos por su impacto en las cuentas provinciales.
En materia productiva, la Legislatura avanzó en normas orientadas a la diversificación económica, entre ellas el marco regulatorio para el desarrollo de la acuicultura, una actividad que promete generar empleo y nuevas inversiones, aunque bajo estrictos controles ambientales. El tema volvió a poner en agenda la tensión entre desarrollo económico y cuidado del ambiente, uno de los debates más sensibles en la provincia.
Las sesiones también estuvieron atravesadas por el contexto económico nacional, con preocupación por la caída de recursos, el impacto en el empleo industrial y la sostenibilidad del gasto público. En ese marco, varios proyectos reflejaron la intención de dotar al Estado provincial de herramientas para enfrentar un escenario financiero complejo.
Con este cierre legislativo, Tierra del Fuego despide el año con definiciones que marcarán la agenda de 2026. La implementación de las leyes aprobadas y su impacto real en la economía, el empleo y las finanzas públicas serán el próximo capítulo de un debate que sigue abierto.