El estudio, elaborado para un grupo familiar tipo compuesto por dos adultos y dos menores, contempla los gastos de vuelo y alojamiento en hotel tres estrellas con desayuno incluido. En ese marco, Mar del Plata, la ciudad más convocante del país en cantidad de turistas, encabeza el ranking nacional con un gasto total estimado de $5.121.156, lo que implica una suba del 4% respecto al verano pasado.
Dentro del turismo interno, Bariloche se consolida como uno de los destinos más caros, con un costo total de $7.693.084 y un incremento interanual del 28%, mientras que Mendoza, incorporada este año al relevamiento, aparece como una opción más accesible, con un gasto aproximado de $3.610.467.
Las diferencias se profundizan al analizar los destinos internacionales. En Río de Janeiro, uno de los favoritos de los argentinos, el costo total de una quincena asciende a $8.412.283, con una suba del 6% interanual. El mayor impacto se registra en los pasajes aéreos, que para una familia tipo alcanzan en promedio los $5.652.727.
Más pronunciado aún es el caso de Punta del Este, donde el gasto total trepa a $10.978.158, impulsado por una suba del 32% interanual, principalmente en los precios de alojamiento. En tanto, vacacionar en Santiago de Chile durante 15 días demanda alrededor de $7.362.873, considerando vuelos y hotelería.
El informe explica que este escenario está directamente vinculado a la evolución del tipo de cambio. Durante 2025, el peso argentino se depreció un 36,97%, mientras que monedas clave para el turismo regional —como el real brasileño, el peso chileno y el peso mexicano— se apreciaron entre un 7% y un 13%, encareciendo de manera significativa los consumos en el exterior para los turistas argentinos.
Este fenómeno se refleja en los precios: los productos típicos en Brasil aumentaron un 63% en pesos argentinos entre enero y diciembre, mientras que en Chile el incremento llegó al 52%, superando incluso el alza registrada en destinos turísticos de México.
Frente a este contexto, se consolida una tendencia hacia escapadas cortas y turismo de proximidad. “Observamos un crecimiento sostenido del interés por viajes de fin de semana, en un escenario de mayor cautela en el gasto familiar”, explicó Damián Di Pace, director de Focus Market.
Algunas alternativas incluyen estadías de 4 días y 3 noches en destinos cercanos a la Ciudad de Buenos Aires: Pilar, con un costo promedio de $612.091; Luján, por $757.764; y San Andrés de Giles, con valores cercanos al millón de pesos.
El estudio también analizó una canasta de 33 productos esenciales para el verano, con un costo total de $984.319, lo que representa un aumento interanual del 12%. Entre los mayores incrementos se destacan los trajes de baño para mujer (+48%), gorras infantiles (+43%) y cremas hidratantes (+43%). En contrapartida, algunos bienes estacionales mostraron bajas de precios, como los inflables para agua (-32%) y los toallones (-13%).
En síntesis, el verano 2026 estará marcado por decisiones más racionales, planificación del gasto y búsqueda de alternativas más accesibles, en un contexto económico que obliga a ajustar el presupuesto familiar para poder sostener el descanso sin que las vacaciones se conviertan en un lujo inalcanzable.