CRÓNICAS DESDE ADENTRO
Cuando el almuerzo no tiene sabor a nada
09:58 | Hay silencios que no se escuchan, pero se mastican. En la cárcel, uno de ellos aparece a la hora del almuerzo: cuando el plato está lleno, pero el sabor no llega; cuando el cuerpo come, pero la cabeza está en otro lado. Desde afuera se repite que los presos comen bien, que reciben buenas raciones, que no les falta nada. Desde adentro, la experiencia es otra, y merece ser contada.