

Los acompañantes terapéuticos, quienes están reclamando porque les adeudan seis meses de los servicios que prestaron, habían sido citados por el propio Franco Tomasevich a la sede de la OSEF, fuera del horario de atención al público para “hablar con más tranquilidad”.
Sin embargo, al llegar al lugar, se encontraron con que no había nadie. Cuando se comunicaron con el director, les dijo que no concurriría porque “se sentía mal”. Les habrían dicho que la reunión se podría concretar hoy, aunque no tienen hora ni cita confirmada.