

Gracias a la intervención del Can Detector de Narcóticos, se detectó la presencia de una sustancia blanca en uno de los compartimientos del vehículo. El can realizó una marcación activa detrás del asiento del conductor, lo que llevó a la apertura de un neceser que contenía un paquete con aproximadamente 300 gramos de cocaína.
La colaboración entre Gendarmería y Aduana permitió desmantelar el transporte de cocaína y detener al conductor del vehículo. El Juzgado y la Fiscalía Federal de la ciudad ordenaron la incautación de la droga y la detención e incomunicación del conductor.
El Can Detector de Narcóticos jugó un papel crucial en este operativo antidrogas, demostrando una vez más su eficacia en la detección de sustancias ilícitas.